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La vida le sonríe a Edda Hannesdottir (ISL). En el momento en el que la entrevistamos como parte de la Serie Caminos a París del World Triathlon, ella participaba de un campamento de entrenamiento en España junto a varios miembros del equipo nacional de Dinamarca. El día de verano era perfecto, como un anticipo de lo que será un sueño cumplido en un par de meses.

Luego de una serie de podios en carreras de Copas Asiáticas, Hannesdottir aseguró su viaje a París, y al hacerlo, se convirtió en la primera triatleta de Islandia en clasificar para los Juegos. 

“Es una sensación fabulosa,” dijo Hannesdottir. “Para mí el camino ha sido largo y difícil, con muchos altibajos. Me siento muy orgullosa de mis logros y agradezco a todos los que me ayudaron.”

A través de días oscuros…

En contraste al sol del verano 2024, la situación era algo más gris no hace tanto tiempo atrás. La temporada 2021 de Hannesdottir estuvo marcada por lesiones, pero se pudo reponer para la campaña siguiente.

“En 2022 me sentí muy motivada y feliz de competir. Sentí fortaleza en toda la temporada.. Como fue la primera en que prácticamente solo hice carreras de la WTCS, aprendí mucho y pude crecer.” La atleta frunce el ceño con tristeza al recordar lo que vendría después. Lesionarme al principio de 2023 fue devastador.”

En lo que parecía ser el peor momento para su sueño de llegar a París, Hannesdottir se encontró nuevamente en el quirófano por daño en los ligamentos de la cadera que seguía a lo largo de la parte derecha de su pierna.

“El diagnóstico llevó tiempo,” explicó. “Y los ligamentos tardan mucho en sanar.”

Como resultado, Hannesdottir tuvo que hacer una pausa de un año… y como en 2021, luego vino la recuperación mientras veía que otros avanzaban en el camino de la clasificación olímpica y contaba las chances que perdía.

“Fue difícil y triste, especialmente porque faltaba nada más que un año para los Juegos. Era mi sueño y parecía muy lejano cuando volví en 2024.”

Cuando se desarrolló el Test Event de París en agosto 2023, Hannesdottir se recuperaba de una intervención quirúrgica realizada en julio admitiendo que no podría estar en los Juegos.

“Recuerdo que estaba sentada en la cama del hotel pensando ‘no hay chance de que pase’. Creo que lo que me ayudó fue sacarlo de foco y concentrarme en el día a día y en sanar mi cuerpo.”

A través de su camino hacia la recuperación total, Hannesdottir contó con el apoyo del programa de Solidaridad Olímpica y con la ayuda del equipo de desarrollo del World Triathlon; de hecho es miembro del Equipo del World Triathlon. Este último en particular la anotó en las carreras correctas y la asistió en su recorrido del proceso de clasificación olímpica.
“¡Me siento agradecida por todo su apoyo!”

... a tiempos mejores

A comienzos de 2024, los nubarrones de 2023 habían comenzado a aclararse y ahora estaba lista para la nueva temporada. Habiéndose sacado la presión de París de los hombros, dijo,  “Estaba lista para disfrutar lo que hacía”.

Su temporada comenzó con un resultado sólido en una Copa África en Sudáfrica, en la que no ganó demasiados puntos, pero que consideró un triunfo porque volvía a correr. Luego, su regreso subió un cambio.

El triunfo en la Copa Asia Pokhara le permitió sumar puntos y la puso en carrera para una plaza de universalidad para París. Islandia es uno de los países elegibles para dichas plazas y para pedirla, Hannesdottir tenía que quedar en el top-180 del ranking mundial.

“Hasta mayo no creí que podría pasar. Realmente esperaba mejorar con cada carrera, pensaba en eso en cada largada. No estaba segura al empezar cada competición porque todavía no llegué a mi estado óptimo, pero estaba muy motivada.”

Despupes de Pokhara llegaron las medallas de dos Copas Asiáticas – plata en Subic Bay y bronce en Osaka – y los puntos comenzaron a fluir. Con tres podios consecutivos, Hannesdottir ingresó al top-180. Lo que había parecido imposible se convirtió en realidad porque clasificó para París. En el momento de la entrevista, solo dos atletas más de Islandia habían clasificado para los Juegos en otros deportes, y Hannesdottir espera servir de ejemplo para inspirar a que jóvenes compatriotas se involucren en el deporte.

Un cambio de ritmo la espera en las próximas semanas. Además de clasificar para París, hará su primera competición de la WTCS en un año, y será en Hamburgo. Su última carrera en 2023 fue en Abu Dhabi, con lo que Hamburgo representa su regreso al máximo nivel de nuestro deporte.

“Estoy emocionada y nerviosa por partes iguales, pero nerviosa en el buen sentido,” dijo Hannesdottir. “El año pasado soñaba en volver a estar en esta posición, agradezco esta chance, y la carrera de Hamburgo es una locura, la vibra es increíble y hay muchos entusiastas.”

“Hice una buena carrera aquí en 2022, pero tengo que recordar que mi regreso es lento. Necesito tenerlo en mente porque el camino es largo y quiero seguir hasta 2028. He estado nadando y pedaleando bien, así que espero construir sobre esa base. No sabes cómo te sientes hasta empezar la carrera, pero espero seguir aprendiendo hasta Los Ángeles.”

Llegan Hamburgo y París, Hannesdottir no podría haber pedido un verano mejor. Después del período de nubarrones, llegaron los buenos tiempos y la triatleta estrella de Islandia está dispuesta a disfrutar cada minuto.

“Estoy tan agradecida de estar en este lugar y de tener esta oportunidad, ¡es asombroso!”